Saturday, September 1, 2012

DIOS,COSMOLOGÍA, NUEVA FILOSOFÍA

“¿Existe Dios? En Búsqueda de un Pensamiento Ontológico Integral
(Los Comentarios Filosóficos-Teológicos y la Traducción Parcial de dos Conferencias del Dr. William Lane Craig fueron Realizados por Giorgio Piacenza Cabrera)
Tema Primero: Conferencia en el Imperial College, Londres: “Evidence for God” (Evidencia de la Existencia de Dios) por William Lane Craig, PhD. (Octubre 18, 2011). (Traducción de Giorgio Piacenza Cabrera.)
Comentario introductorio del traductor:
A veces las discusiones sobre la existencia de un Dios personal (teísmo) y la existencia material del Universo sin necesidad de implicar a este Dios creador teísta se sobre-simplifican y polarizan irracionalmente para defender una posición reduccionista (no integral, no integradora, no compleja) quizás cientifista versus otra dogmática religiosa pero ambas excluyentes. Ya no es posible sostener estas exclusiones del pensar metafísico porque se están conociendo formas de integrar información esencial mutuamente compartida. Un aporte interesante al “pensamiento complejo” y a la búsqueda de la integración de aparentes opuestos irreconciliables ideológicos nos lo ofrece William Lane Craig, un apologista Cristiano protestante que sabe de cosmología, física, teología y filosofía y que ha salido airoso en debates con científicos y filósofos ateos y materialistas prominentes. Aunque no siempre estoy de acuerdo con todo lo que Lane propone sobre diversos temas reconozco que la revisión de teorías cosmológicas de manera filosófica y teológica tienen mucha importancia para elevar el nivel de conversación y quizás hallar que se puede llegar a un entendimento tanto racional como objetivo que avale la existencia de Dios. Para mí, el tema más interesante que Lane Craig desarrolla es aquél que trata de la existencia de Dios basándose en el Argumento de Kalam. El Dios al que Lane Craig se refiere no solo es el Dios racional y científicamente desautorizado de las religiones sino el Dios ontológico y metafísico. Hay que reconocer que Lane Craig lleva la conversación sobre estos temas a un nivel más útil para el desarrollo del pensamiento complejo e integrador enrumbándolo a un posible acuerdo entre científicos y teólogos. Es una contribución a un nivel de discurso intelectual y humano muy necesario pues la complejidad de las relaciones sistémicas y culturales humanas y globales actualmente exigen la capacidad de reconocer todo conocimiento válido dentro de un mosaico de partes coherentes. Esto debe lograrse a pesar que los modelos teóricos científicos y religiosos aún más reconocidos son habitualmente pensados (e irracionalmente sentidos) como mutuamente excluyentes. Al respecto yo pienso que sí hay solución a la falta de integración y que es tiempo que la inteligencia natural del Hombre en cuanto a principios universales aplicables a la naturaleza de la “realidad” se reeduque y reconozca las pautas que unen por sobre las que se oponen. Esto tendría efectos salubres entre personas que actualmente se distribuyen en el mundo sintiéndose en la necesidad de defender posiciones religiosas, científicas, políticas, filosóficas y personales mutuamente exclusivas en un mundo precario que requiere la pronta creación colectiva de una cultura mucho más unitiva.
Principalmente, previo a la igualmente importante integración de elementos doctrinales tanto científicos como religiosos (elementos aparentemente irreconciliables pero que en sus ideas esenciales podrían ser compatibles) se halla el misterio de la existencia absoluta de Dios cuya Presencia no solo habría sido fundamental en la creación y/o manifestación del Cosmos (sea este entendido como “cíclico” o como lineal) sino que permanentemente sostendría tanto al ser de las cosas finitas como a la inteligibilidad de la experiencia. Aun más, la comprensión de este “Dios” en su sentido más abstracto y absoluto eventualmente llega a trascender e incluir-sustentar todo tipo de lógica o inteligibilidad por lo que para comprenderlo sin contradicción solo queda vivirlo o experimentarlo en armonía con las lógicas a las que da lugar. Este Dios de la teología negativa occidental y del misticismo oriental (tanto si se le define como el Ser positivo por excelencia como en el Vedanta o si se le define negativamente como aquello que no puede ser definido pero que genera la idea del “Sunyatta” en el budismo); este Dios/no Dios que se le define como el “Ser Supremo” que da el ser de todos los seres contingentes o que se le define como la “vacuidad” o el “espacio” que puede abarcar e incluir a toda apariencia, a todo aparente movimiento, contingencia y forma es el mismo que bajo otra percepción no solo se manifiesta como el Dios personal de las religiones de la Biblia sino como el Dios deísta (la razón universal) de los racionalistas del iluminismo). Aún el “Dios” de los empíricos que podría ser la naturaleza (ya que nada puede existir sin Dios o aparte de Dios) es el mismo “Dios” bajo el aspecto de acción, de energía, de movimiento y de forma, reconociéndose así tres expresiones supremas: la trascendente (reconciliable en el Hombre como la Belleza por la mística subjetiva) , la inteligente (reconciliable en el Hombre como la Verdad por la mente y la razón) y la activa (reconciliable en el Hombre como el Bien por la relación armoniosa).
Si el comienzo de nuestro universo/espacio-tiempo coherente hubiera sido en un “universo sin fronteras” como Stephen Hawking propone, podríamos hablar tanto de un comienzo como de un universo cíclico porque la fisicalidad y lo que llamamos “espacio-tiempo” surgirían de un universo más primario, un Universo Mental. Teniendo en cuanta esto podríamos decir que la alegoría al “sueño de Brahma” que sueña no solo al universo conocido sino a todos los universos posibles se da gracias a la existencia de un nivel de la realidad más fundamental y comprensivo que el físico. Así una manera de entender el origen sería cíclicamente (como muchas culturas aparte de la occidental han propuesto) al considerar que el comienzo del espacio-tiempo deriva de un Universo Mental (en el modelo de Hawking el comienzo del universo es redondeado e indistinto y no un punto o singularidad única) y otra manera de concebir el comienzo (si hablamos del comienzo de nuestro espacio-tiempo) sería lineal y absoluto desde nuestra perspectiva física.
Y ¿qué hay de la posición creacionista ex nihilo versus la emanacionista de Plotino que se adecúa a un modelo cósmico-esotérico de varios planos y subplanos de existencia y que Arthur O. Loveloy estudió en su libro la “Gran Cadena del Ser”? ¿Pueden ambas versiones ser compatibles con un mismo Dios? Como dijo el gran rabino Isaac Luria, si Dios substrajo (o substrae en tiempo presente pues siempre ocurriría ya que Dios se halla en la eternidad fuera del tiempo) en parte su “Shekinah” o su “esplendor” para que los seres y cosas dependientes de Él (y siempre en esencia y potencia existentes en Él) tengan un “espacio” propio para manifestar su aparente independencia por lo que sí se puede integrar la explicación creativa “ex nihilo” como acto de poder absoluto con la explicación emanacionista que sugiere que la sobre-abundancia infinita de su Ser Dios naturalmente “emana” y sostiene todos los mundos posibles (tanto físicos como no físicos).
Yo añadiría que Dios así procede pero no solo en niveles o etapas más o menos ontológicamente cercanas o alejadas de su Ser Puro (ser absoluto sin apariencias) sino que bajo sus tres aspectos fundamentales (Ain, Ain Sof y Ain Sof Aur en la Cabala; Padre trascendente, Logos y Espíritu Santo en el cristianismo; el eterno incomprensible compatible con la teología negativa, el Logos a través del cual se ordena toda la apariencia de lo contingente y la energía o actividad que vivifica la apariencia). En el judaísmo, el Espíritu Santo también coincide con el Ruah Hakodesh, la presencia y fuerza dinámica de Dios en su creación. Esta puede ser reconocida como una “fuerza” que Dios usa o en términos más cristianos también como una “persona”.
Creo que en esta “Trinidad” (reconocida de muchas formas en varias religiones) estos tres aspectos fundamentales se dan en la unidad de una inmanencia mutua (o sea que no solo se relacionan o se interpenetran sino que son uno del otro interiormente) pero metafísicamente después de la reflexión suprema “Yo Soy” que IMPLICA (en apariencia) que algo “no es” (no que realmente no es pues hasta la negación es del ser y es) y por ende a la apariencia de la dualidad (y a la generación de los cuadrantes de lo Interior, lo Exterior, lo Individual y lo Colectivo). Pienso que los niveles del ser en apariencia que surgen de esta reflexión suprema corresponden directamente a las personas o aspectos de la Trinidad y también son primariamente tres. Pienso que sus operaciones causales (en sus exterioridades que se generan con la dualidad) corresponden u obedecen a cada uno de los aspectos hasta el nivel causal físico que conocemos.
Así, el Meta Universo Físico o “Multiverso” (quizás compuesto de una cantidad indeterminada de universos físicos) tendría exteriores objetivos materiales (exteriores que se comparten colectivamente) que corresponden a un orden causal primariamente exterior; el Universo Mental (que incluye y trasciende a todos los universos físicos) tendría exteriores objetivos (que se pueden compartir colectivamente) que primariamente corresponden a un orden causal primariamente interior o subjetivo. En el primer caso, la materia formada por la sustancia universal “Akasha” (y llamada “Butakasha” para los universos físicos) obedece primariamente a causalidades físicas y en el segundo caso esta substancia (ahora llamada “Chitakasha”) obedece primariamente a causalidades mentales y constituye una realidad primaria mental o universo sutil (de varios subplanos). Todos los universos primarios estarían regidos e interpenetrados por los aspectos trinitarios pero también pienso que los universos físicos (expresiones más correspondientes al tercer aspecto de la unidad divina “Espíritu Santo”) podrían estar combinados en diferentes proporciones con la substancia del universo mental generándose universos físicos más o menos sutiles y más o menos inerciales.
Por otro lado, el Universo Mental Primario sería una expresión directamente más correspondiente a la segunda persona de la trinidad, al Logos, a Dios como razón, orden, proporción, significación mental e inteligibilidad. Finalmente también habría un “universo” mucho más sutil y vasto donde la causalidad reinante en sus casi imperceptibles exteriores colectivos (formados por el Chidakasha) obedecería a principios espirituales y este sería el “Universo Causal” o “Universo Semilla”, el Universo representativo del Padre, el más alto cielo por así decir, o la realidad ontológica más elevada de los principios más universales que hacen posible a lo mental e inteligible.
Fuera de toda manifestación/creación estaría el Ser No Dual, Dios Padre Absoluto trascendente pero no ajeno a toda distinción o no distinción. La “creación” sería una mutación en apariencia de lo Eterno que también permanece libre de esa apariencia y la visión panenteísta (no la panteísta) de Dios podría reunir a todas las formas como he tratado de describir a este Ser Supremo.
A continuación: Conferencia de William Lane CraigEvidence for God”:
Argumento de la Contingencia
1.   Todo lo que existe tiene una explicación de su existencia, sea en la necesidad de su propia naturaleza o en una causa externa.
2.   El universo existe.
3.   Si el universo tiene una explicación de su existencia, esa explicación es una causa externa, trascendente y personal.
4.   Por lo tanto la explicación de la existencia del universo es una causa externa, trascendente y personal.
Hay que considerar que el universo no se extiende hacia el pasado infinito sino que este comenzó a existir porque ¿qué es una infinidad substraída de otra infinidad? Matemáticamente obtenemos respuestas contradictorias. Por ejemplo si tuviéramos una cantidad infinita de monedas y sustrajéramos a todas las monedas impares, ¿cuantas monedas nos quedarían? Las monedas pares también serían una infinidad por lo que una infinidad menos otra infinidad sería una infinidad. Ahora supongamos que eliminamos a todas las monedas que son más que tres. ¿Cuantas quedarían? Solo tres por lo que en este caso, infinidad menos otra infinidad (de monedas más que tres) da: tres. En ambos casos se sustrajo una cantidad idéntica de monedas de una cantidad idéntica de monedas y obtuvimos dos respuestas contradictorias. Uno puede obtener cualquier resultado desde cero hasta infinito y por esta razón operaciones inversas como la resta y la división están prohibidas en la aritmética transfinita. Esto muestra que el infinito es un concepto mental como decía Hilbert pero hablar de eventos pasados no es solo una idea. Son hechos concretos que no podrían extenderse hacia el pasado infinito.
En la actualidad tenemos evidencia científica bastante robusta que concuerda con el razonamiento filosófico y muestra que el universo (incluyendo al tiempo y al espacio) tuvieron un comienzo absoluto hace un tiempo finito. En el 2003 Alan Guth, Alexander Vilenkin y Arvind Borde demostraron que cualquier universo que en promedio esté en un estado de expansion a través de su historia no puede ser eterno en su pasado sino que deben tener una “frontera” espacio-temporal. Este teorema no solo se aplica al modelo estándar sino a modelos de gravitación cuántica semi clásicos, a modelos inflacionarios del universo y a modelos de “branas” (membranas) con más dimensiones. Vilenkin afirma que “con esta prueba los cosmólogos razonables ya no pueden esconderse detrás de la posibilidad de un universo con un pasado eterno. Ahora no hay escape y tienen que afrontar el problema de un comienzo cósmico”.
Anthony Kenny de la Universidad de Oxford entendió el “problema” al escribir que “un proponente del Big Bang, al menos si es ateo, debe creer que el universo vino de la nada y debido a nada”. Pero de hecho esto no tiene sentido especialmente si consideramos que sería una contradicción con la posición ontológica más exitosa en la historia de la ciencia: el principio metafísico que de la nada nada puede surgir. Entonces, cual es la razón que el universo existe en vez de nada? De donde vino? Debe haber una causa que lo trajo a la existencia. Según el argumento cosmológico: Lo que comienza a existir tiene una causa. El universo comenzó a existir, ergo, el universo tiene una causa. Dada la verdad de las dos premisas, la conclusión procede necesariamente. Pero ¿qué tipo de “causa” puede ser esta? Debido a la naturaleza del caso, esta causa debe ser en si misma un ser no causado, inmodificable, atemporal, e inmaterial que creó al universo.
Debe ser no causado porque hemos visto que no puede haber una regresión infinita de causas. Debe ser atemporal y por lo tanto inmodificable por lo menos en relación al universo porque creó al tiempo y ya que también creó al espacio debe trascenderlo y por lo tanto ser inmaterial o no físico. Más aun yo argumento que esta causa debe plausiblemente ser PERSONAL porque ¿cómo podría una causa atemporal dar origen a un hecho temporal con un comienzo como el universo? Si la causa solo fuese un conjunto operativo y mecánico de condiciones necesarias y suficientes entonces la causa no podría existir sin su efecto (causa y efecto inseparables). Una vez que las condiciones suficientes se dieran entonces el efecto también se daría. Por ejemplo, supongamos que la causa del agua congelada es que la temperatura esté a menos de cero grados centígrados. Si la temperatura fuera cero grados centígrados desde el pasado eterno, entonces cualquier agua relacionada estaría congelada desde la eternidad. Sería imposible para el agua comenzar a congelarse desde un tiempo finito en el pasado. Entonces, si la causa está permanentemente presente, su efecto también lo estará.
La única manera para que una causa sea atemporal y para que su efecto comience en un tiempo finito en el pasado es que la causa sea un agente personal con libertad volitiva y capaz de espontáneamente crear un efecto nuevo sin condiciones determinantes antecedentes. Por ejemplo un hombre que ha estado sentado desde la eternidad puede libremente escoger ponerse de pie y entonces tendríamos un efecto con un comienzo que surgiría desde una causa eternal. De esta manera llegamos no solo a una causa transcendental del universo sino a su creador personal.
Los científicos han hallado en los últimos 50 años que la existencia de la vida inteligente depende de un muy delicado equilibrio de las condiciones iniciales en el Big Bang. La existencia de la vida parece depender de una conspiración de condiciones iniciales simplemente dadas en el Big Bang en un grado prácticamente incomprensible e incalculable. Cuando las leyes de la naturaleza son representadas matemáticamente aparecen en ellas ciertas constantes como la constante de la gravitación pero estas constantes no están determinadas por las leyes de la naturaleza. Las leyes de la naturaleza son consistentes con una amplia gama de valores para estas constantes. Además de estas constantes hay ciertas cantidades arbitrarias que son introducidas como condiciones iniciales sobre las que operan las leyes de la naturaleza. Por ejemplo, la cantidad de entropía en el universo temprano. Ahora, todas estas constantes caen dentro de un rango increíblemente estrecho de valores que permiten que ocurra la vida. Si alguna de estas constantes fuera alterada en un mínimo, el equilibrio sería destruido y no existiría la vida.
Solo hay tres posibilidades para explicar esta destacada afinación del universo: 1. Necesidad física, 2. Azar. 3. Diseño. La primera opción se sostiene en la idea que tiene que haber una “teoría del todo” (Theory of Everything) o “TOE” aun desconocida que explicaria porque el universo es como es y que no hay ninguna opción o solo una minima opción de que sea distinto. La segunda alternativa sostiene que la afinación depende enteramente del azar y dice que es un “accidente” el porqué la afinación del universo es como es y que nosotros somos los beneficiados afortunados. La tercera alternativa rechaza a las dos primeras a favor de una “mente” inteligente detrás del Cosmos, una “mente” que diseñó al universo para permitir que ocurriera la vida.
¿Cual alternativa es la más plausible? La primera posibilidad (necesidad física) parece la menos plausible porque las constantes son independientes de las leyes de la naturaleza. Las leyes son consistentes con una muy amplia gama de valores para estas constantes y cantidades. Por ejemplo, la candidata más promisoria de ser una TOE válida, la Teoría de las Supercuerdas o Teoría M, permite un “paisaje cósmico” de 10500diferentes universos posibles gobernados por las leyes de la naturaleza actuales. Por lo tanto, no hace nada para explicar los valores observados de las constantes y cantidades y para hacerlos físicamente necesarios. Y ¿qué hay de la segunda alternativa (que la afinación del universo se debe al azar)? El problema con la segunda opción (que la afinación del universo se debe al azar) es que las probabilidades en contra que exista un universo que permita la vida son tan incomprensiblemente grandes que no pueden ser encaradas razonablemente.
Aunque en el “paisaje cósmico” habrá un gran número de universos que permitan la vida aun así la proporción de mundos que permitan la vida será tan insondablemente pequeña en comparación con este paisaje tomado como un todo que un dardo arrojado al azar hacia el “paisaje cósmico” no tendría ninguna probabilidad significativa de dar en un mundo biofavorable. Entonces para poder rescatar la hipótesis del azar, sus proponentes por lo tanto se han visto obligados de adoptar la extraordinaria hipótesis que existen un número infinito de universos paralelos aleatoriamente ordenados. Estos serían indetectables por nosotros y componiendo un tipo de ensamblaje universal o “Multiverso” en el cual universos finamente calibrados aparecerán simplemente debido al azar y simplemente ocurre que nosotros estamos en uno de ellos. Sin embargo hay por lo menos dos fallas principales respecto a la hipótesis de ensamblaje universal. Primero no hay ninguna evidencia que tal ensamblaje universal exista. Nadie sabe si hay otros universos y muchos menos si están ordenados al azar y si su número es infinito. Más aún recuerden que Borde, Guth y Vilenkin probaron que cualquier universo que está en un estado de expansión cósmica continua no puede ser infinito en el pasado. Su teorema también se aplica al Multiverso. Por lo tanto ya que su pasado es finito, solo un número finito de universos podría haber sido generado hasta ahora y no habría ninguna garantía que un universo finamente calibrado habría aparecido en algún lugar del ensamblaje universal. Segundo, y más fundamentalmente, si nuestro universo solo fuese un miembro al azar de un ensamblaje universal infinito entonces es abrumadoramente más probable que debiéramos estar observando un universo mucho más diferente delque de hecho observamos. Roger Penrose ha calculado que es inconcebiblemente más probable que nuestro Sistema Solar se haya formado súbitamente en un instante a través de colisiones aleatorias de partículas que el que un universo finamente calibrado exista. De hecho Penrose llama a esto “comida de gallinas extrema” en comparación. De manera que si nuestro universo solo fuera un miembro aleatorio de un ensamblaje universal es inconcebiblemente más probable que debiéramos actualmente observar una isla de orden no más grande que nuestro Sistema Solar puesto que habrían muchos más universos observables en el ensamblaje universal en los que nuestro Sistema Solar llega a existir instantáneamente a través de la colisión accidental de partículas que el número de universos finamente calibrados para permitir la existencia de observadores corpóreos como nosotros. O si no además, si nuestro universo solo fuera un miembro al azar del ensamblaje universal entonces deberíamos estar observando eventos altamente extraordinarios como caballos apareciendo y dejando de ser a través de la colisión aleatoria de partículas ya que tales cosas serían ampliamente más probables que la existencia de un universo finamente calibrado en la que todas las constantes y cantidades de la naturaleza caen solo debido al azar en los valores infinitesimales adecuados para permitir que la vida ocurra. El número de universos observables con caballos súbitamente apareciendo y dejando de existir es muchísimo más abundante en el ensamblaje universal que universos como el nuestro y por lo tanto (estos universos) deberían ser observados por nosotros y ya que no tenemos tales observaciones –argumenta Penrose- ese hecho fuertemente desconfirma la hipótesis del ensamblaje universal. Por lo tanto, por lo menos basándonos en el naturalismo, creo que es sumamente improbable que tal ensamblaje exista.
Entonces parece que la calibración fina no es debida a una necesidad física ni al azar por lo que esto lógicamente conlleva a que se debe al diseño. Por lo tanto este argumento nos lleva hacia un diseñador del universo.
Argumento de la POSIBILIDAD de la Existencia de Dios:
Para entender este argumento tienen que entender lo que los filósofos quieren decir con el término “mundos posibles”. Un mundo posible es como un mundo podría ser; es una decripción completa de una realidad; no es necesariamente algo concreto como un planeta o un universo. Es la posible descripción de un mundo. En contraste, el mundo actual es la descripción que es verdadera. Otros mundos posibles son descripciones que no son de hecho verdaderos pero que PODRÍAN haber sido verdaderos.
Decir que algo existe en algún mundo posible es equivalente a decir que hay alguna descripción posible de la realidad que incluye a esa entidad en la descripción. Decir que algo existe en todos los mundos posibles significa que sin importar qué descripción es verdadera se incluirá a la entidad en la descripción. Por ejemplo, los unicornios no existen de hecho pero hay algún mundo posible en el que los unicornios existen. De otro lado, muchos matemáticos piensan que objetos matemáticos como los números existen en todo mundo posible. Con esto en mente, consideren el argumento ontológico que fue descubierto en el año 1011 DC por el monje Anselmo de Canterbury.
Dios es por definición el ser más grande concebible. Si se pudiera concebir algo más grande que Dios, entonces eso sería Dios. Entonces el mismo concepto sobre Dios es el del ser concebible más grande: un ser máximalmente grande. Entonces, ¿cómo sería un ser así? Bueno, sería todopoderoso, omnisciente, todo bueno y existiría en todo mundo lógicamente posible. Un ser que careciera de alguna de esas cualidades no sería maximalmente grande y uno podría concebir de algo más grande. Pero lo que esto implica es que si la existencia de Dios fuese simplemente POSIBLE entonces se deduce que Dios debe necesariamente existir. Esto es porque si un ser maximalmente grande existe en cualquier mundo posible, entonces existe en todos ellos. Esto es parte de lo que significa ser “maximalmente grande”; ser todopoderoso, omnisciente y todo bueno en todo mundo lógicamente posible. Entonces si la existencia de Dios solo fuese posible entonces Él existe en todo mundo lógicamente posible y, por lo tanto, también el mundo actual (nota del traductor: ¿o pluralidad de mundos actuales?).
1.   Es posible que un ser maximalmente posible –Dios- exista.
2.   Si es posible que un ser maximalmente grande exista entonces un ser maximalmente grande existe en algún mundo posible.
3.   Si un ser maximalmente grande existe en algún mundo posible, entonces existe en todo mundo posible.
4.   Si un ser maximalmente grande existe en todo mundo posible, entonces existe en el mundo actual.
5.   Por lo tanto, un ser maximalmente grande existe en el mundo actual.
6.   Por lo tanto, un ser maximalmente grande existe.
7.   Por lo tanto, Dios existe.
Quizás les sorprenda saber que los pasos 2 al 7 de este argumento son relativamente no controversiales. La mayoría de los filósofos estarían de acuerdo que si la existencia de Dios simplemente fuese posible, entinces Él debe existir. Así que toda el asunto está ligado a la 1ra premisa: ¿Es la existencia de Dios posible? ¿Ustedes que piensan?
El ateo tiene que demostrar que la existencia de Dios es imposible. Tiene que decir que el concepto de Dios es incoherente, como el concepto de un esposo soltero o de un circulo cuadrado. Pero el concepto de Dios no parece ser incoherente de esa manera. La idea de un ser que es todopoderoso, omnisciente y todo bueno en todos los mundos posibles parece ser lógicamente coherente. Más aún, hay otros argumentos para la existencia de Dios que por lo menos sugieren que es posible que Dios exista.
Nota del traductor: San Anselmo de Canterbury esencialmente dijo que Dios (el ser más grande y completo y perfecto concebible) tiene por lo menos que tener la cualidad de “existencia”. De no ser así, cualquier otro objeto contingente aunque realmente existente por más insignificante que parezca (un guijarro, una bacteria, una molécula) sería más grande, perfecto y completo que Dios. Si Dios es definido como “perfecto” entonces tiene que existir. Algunos filósofos han dicho que no porque uno pueda imaginar o definir algo en la mente esto exista (si me imagino una pulga que come vacas que vuelan más rápido que la luz después de correr tabla Hawaiana no significa que exista). Supongo que estos filósofos definen a lo “existente” como a lo que se manifiesta en espacio y tiempo y no a productos de la mente. Otros filósofos han dicho que el argumento ontológico de San Anselmo solo es válido respecto a Dios el único ser no contingente o ser necesario.
Yo pienso que ni siquiera sería posible concebir a Dios (como al ser más grande, completo y perfecto, o sea, maximalmente grande) si Dios no existiera. La posibilidad de pensar en la existencia de Dios (como el ser maximal o perfecto) también demostraría su existencia. Solo en el caso de pensar en la perfección está implicada la existencia. En esta perfección coinciden, la idea y el ser, la concepción y la substancia, lo epistemológico y lo ontológico. Solo el hecho de poder pensar en un ser “perfecto” implica que este existe pues no sería perfecto si no existiera. Ya que la idea de un ser “perfecto” implica que debe tener existencia no sería posible pensar en un ser perfecto sin que necesariamente ese ser exista y ya que podemos pensar en un ser perfecto, ese ser tiene que existir.
Tema Segundo: “¿Ha Hawking Eliminado a Dios?/Orígenes del Universo”. Conferencia de William Lane Craig, PhD (traducción por Giorgio Piacenza).
La siguiente conferencia por William Lane Craig y Rodney Holder se dio en St. Andrew the Great Church, Cambridge, UK el 1 de octubre, 2011. Principalmente traduzco al Dr. Craig.
Origenes del Universo: ¿Ha Hawking Eliminado a Dios?/Orígenes del Universo (primera parte, William Lane Craig):
“El tiempo imaginario del “Modelo Sin Fronteras” (No Boundary) de Hawking y Mlodinow es físicamente ininteligible y un truco matemático para evitar confrontar el comienzo del universo. Hay otros modelos alternativos que Hawking no menciona en “El Gran Diseño” (su libro más reciente escrito con Mlodinow). La singularidad cosmológica del comienzo del Universo que aparece en modelos clásicos no es explicada. El tiempo puede ser considerado como otra dimensión del espacio lo que nos ayudaría a eliminar el problema del comienzo del tiempo, así como antes logramos eliminar el problema del “borde del mundo”. Hawking dice: “Supongamos, que el comienzo del Universo fuse como el “Polo Sur” de la Tierra con grados de latitud jugando el rol del tiempo. A medida que uno se mueve hacia el norte, los círculos de latitud constantes representando el tamaño del Universo se expandirían. El Universo comenzaría como un punto en el “Polo Sur” pero el “Polo Sur” es como cualquier otro punto. Preguntar que sucedió antes del comienzo del Universo sería una pregunta sin sentido porque no hay nada más al sur que el “Polo Sur”. En este modelo, el espacio-tiempo no tiene un borde o frontera. Las misma leyes naturales rigen en el “Polo Sur” como en otros lugares”.
Este es un modelo muy diferente que el que Hawking nos dio en “Una Breve Historia del Tiempo”. En este último modelo Hawking utiliza números imaginarios como la raíz cuadrada de -1 para la variable de tiempo en sus ecuaciones para así eliminar la singularidad cosmológica inicial que es la frontera del espacio-tiempo en el modelo estándar del Big Bang. En vez de terminar en un punto como en un cono, el segmento inicial de espacio-tiempo es redondeado y el “Polo Sur” en esta superficie redondeada es como cualquier otro punto en esa superficie lo que origina la idea que no hay ningún borde o frontera. Ya que el tiempo imaginario se comporta como una dimensión del espacio, Hawking interpreta su Universo sin fronteras como que “solo es”. Sin embargo…en el libro también se interpreta al “Polo Sur” como el punto de inicio tanto del tiempo como del Universo. A pesar del hecho que el tiempo imaginario se comporta ahora como una dimensión espacial, Hawking permite que los círculos de latitud jueguen el rol del tiempo que tiene un punto de origen en el “Polo Sur”.
Cuando Hawking habla sobre el tiempo como teniendo un “comienzo” se está refiriendo a una objeción muy antigua en contra que el Universo tiene un comienzo, una objeción que su modelo remueve. El dice que la objeción es la pregunta: ¿Qué pasó antes del comienzo del Universo? Ahora, Hawking tiene razón en decir que esta pregunta no tiene sentido pero lo que se olvida mencionar es que la pregunta también carece de sentido en el modelo del Big Bang estándar ya que no hay nada antes de la singularidad cosmológica inicial. En ambos modelos, el Universo tiene un comienzo temporal absoluto. Entonces la mejor pregunta no es que había antes del comienzo del Universo sino porque el Universo comienza a existir: ¿Porqué hay algo en vez de nada? Hawking y Mlodinow defienden una aproximación de “arriba a abajo” o “descendente” a esta pregunta. La idea es comenzar con nuestro Universo actualmente observado, caracterizado por el modelo estándar de física de partículas y luego calcular –dada la condición “sin fronteras”- la probabilidad de las varias historias permitidas por la física cuántica para que el Universo llegue a su estado actual. La historia más probable representa la historia de nuestro Universo observable.
Hawking y Mlodinow avocan el surgimiento espontaneo del Universo a partir de la nada y respecto al termino “espontaneo” parecen querer decir que el Universo no tiene una causa. Pero ¿no se deduce esto a partir del modelo? El método de aproximación de arriba a abajo calcula la probabilidad de nuestro Universo siempre que primero tengamos una condición sin fronteras. Esta aproximación no calcula que la condición sin fronteras debiera existir en primer lugar. Pero esta condición sin fronteras no es ni metafísica ni físicamente necesaria. Si el Universo llegó a existir sin causa y de la nada este podría tener cualquier configuración espacio-temporal concebible puesto que la nada o el no ser no posee propiedades o limitaciones y no esta gobernado por ley física alguna. La física solo comienza en el “Polo Sur” en este “Modelo Sin Fronteras”. No hay algo en este modelo que indique que el Universo llegó a existir sin una causa. De hecho la idea que el ser pueda surgir sin una causa a partir del no ser parece ser metafísicamente absurdo.
En una reciente entrevista televisiva en el programa “Curiosity” Hawking fue más alla y declaró que el ateismo es verdadero porque no hay un tiempo en el cual Dios pudo haber creado al Universo ya que el tiempo comenzó con el Big Bang. Pero este es un argumento terrible puesto que asume sin justificación que las causas deben preceder a sus efectos en el tiempo. Pero los filósofos frecuentemente discuten casos en los que las causas pueden ser simultáneas con los efectos. Entonces ¿porqué (racionalmente hablando) la creación y manifestación del Universo por Dios no puede ser simultanea con el Universo manifestándose en la existencia?
Hawking insiste que, técnicamente hablando, la singularidad inicial no es un punto en el espacio-tiempo sino un punto frontera o límite del mismo espacio-tiempo. Aun así podemos decir que la creación del Universo por Dios fue coincidente con el Universo llegando a existir, o sea que ocurrieron juntos en la frontera del espacio-tiempo. Además, supuestamente este modelo ha eliminado el punto límite del espacio-tiempo en favor de un punto de comienzo ordinario como el “Polo Sur” entonces cual puede ser el problema?
Hawking y Mlodinow parecen no haber resuelto el problema de porque hay algo en vez de nada ya que regresan al mismo en su ultimo capítulo y dan una respuesta muy distinta. En ella explican que hay una energía constante contenida en el vacío espacial y si la energía del Universo positiva asociada con la materia esta igualmente equilibrada por la energía negativa asociada con la gravedad entonces el Universo puede llegar a ser espontáneamente como una fluctuación espontánea de la energía del vacío que entonces- ingeniosamente de su parte- dicen que ahora podría ser llamada “cero”. Ahora esta parece ser una descripción muy diferente sobre el origen del Universo porque presupone la realidad del espacio y la energía contenida en el. Así es que confunde cuando Hawking y Mlodinow concluyen que ya que hay una ley como la de la gravedad el Universo puede crease y se creara a si mismo. Ahora se dice que la “nada” referida en el capítulo seis del libro no es realmente “nada” despues de todo sino “espacio” lleno de energía del vacío. Pero este espacio que está lleno de energía ya no se puede pensar como la “nada” y tampoco puede concebirse como anterior al “Polo Sur”. Esto muestra que el “Modelo Sin Fronteras” podría aplicarse para describir la evolución de nuestro Universo desde su origen en el “Polo Sur” hasta su estado actual pero no nos dice nada al respecto de porque existe el Universo o porque hay algo en vez de nada. En realidad la palabra “nada” en el vocabulario de Hawking no posee el significado tradicional de “no ser” sino que se refiere al “vacío cuántico”.
En una entrevista que Hawking y Mlodinow otorgaron recientemente a Larry King para CNN y Hawking dijo que la gravedad y la física cuántica causan que el universo surja de la nada. Larry King preguntó: ¿Y quien creo la nada? ¿De donde salio la nada? Mlodinow responde: Segun la física cuántica no existe tal cosa como “la nada”. En este intercambio ridículo vemos que Hawking utiliza el termino “la nada” para referirse al vacío cuántico pero Mlodinow lo usa para referirse al “no ser” y ambos evitan la difícil pregunta de porque hay algo en vez de nada equivocándose en el uso de la terminología. A pesar que Hawking y Mlodinow atacan a la religión varias veces en el libro, este también es útil para quienes estén interesados en una teología natural porque los autores afirman y argumentan a favor de un comienzo absoluto del tiempo y del Universo lo cual apunta irremediablemente hacia una causa trascendente más alla del Universo”.
Origenes del Universo: ¿Ha Hawking Eliminado a Dios? Segunda parte (William Lane Craig)
“Respecto a la doctrina de la creación, la teología Cristiana distingue entre “creatio originans” y “creatio continuans”, o sea entre creación originante y creación continua. Para afirmar que Dios conserva al Universo en existencia momento tras momento no es necesario negar la creación y que hubo un estado de cosas en que Dios existió por sí mismo y que el Universo llega existir en el primer momento de la creación. Aunque es importante el argumento de la contingencia del Universo no hay que dejar de lado “creatio originans”. En la Biblia la palabra “creación” siempre se presenta en el tiempo gramatical pasado. Siempre es un acto temporal y no solo un acto continuo.
Pregunta de la audiencia: “Si Dios creó al todo; si Dios creo al continuo del espacio-tiempo ¿qué creo a Dios? Respuesta de Lane Craig: Los cristianos no creen que Dios creó todo. Dios creo a todo lo distinto a El. Dios no se creo a si mismo. Dios es un ser no creado. El concepto de Dios en la tradición teológica Cristiana es que Dios es un ser necesario, no un ser contingente. Esto es que Dios existe en todos los mundos posibles. Es metafísicamente imposible que no pueda existir. Es metafísicamente necesario. Entonces Dios es la causa no causada de todo menos de si mismo. No es una definición de Dios sino uno de sus muchos atributos. Podría también decir que es omnisciente, omnipotente, auto existente, eterno, moralmente perfecto y otros atributos que podrían dar una aproximación parecida a una definición sobre Dios.
Todo lo que comienza a existir tiene una causa pero un ser eterno y metafísicamente necesario no tiene una causa.
Pregunta de la audiencia: ¿Hay alguna evidencia empírica para la existencia de Dios? Respuesta de Lane Craig: Diría que podría haber evidencia empírica para una premisa en un argumento filosófico que podría llevar a una conclusión que tenga importancia teológica o a una conclusión que Dios existe. No es buscando a un Dios para explicar los datos científicos que le faltan a la ciencia. Por ejemplo escuche este argumento. Primera premisa: Todo lo que empieza a existir tiene una causa. Segunda premisa: El Universo comenzó a existir. Por lo tanto, el Universo tiene una causa. Ahora, la segunda premisa “el Universo comenzó a existir” es una premisa para la que hay Buena evidencia científica. Es una afirmación neutral en el sentido religioso y que se puede hallar en cualquier libro de astronomía y astrofísica. Es una premisa para la cual la evidencia científica es relevante y puede llevar a una conclusión filosófica con gran importancia teológica. La evidencia sirve para las premisas que de manera lógica llevan a la conclusión que Dios si existe. El argumento lleva a la conclusión lógica sobre la existencia de un ser más allá del Universo o trascendente al mismo. Luego podríamos deducir algunas de las propiedades teológicas del mismo.
Otro ejemplo sería la afinación (de las constantes físicas) del Universo que se puede deberse a: necesidad física, azar o diseño. Muchos cosmólogos (como Rodney Holder) deducen que la afinación del Universo no se debe ni a necesidad física ni al azar por lo que lógicamente tiene que deberse al diseño”. Rodney Holder: “Porque son las leyes de la naturaleza como son? Esto lleva a un discurso metafísico necesario. Hay muchos tipos de evidencia para la existencia de Dios y no hay que reducirlas a lo que se puede observar en un laboratorio. Las experiencias personales también son un tipo de evidencia que no pueden ser refutadas concluyentemente”.
W. Lane Craig: “El “Modelo sin Fronteras” de Hawking habla del comienzo de un Universo y no de múltiples universos en un Multiverso y por eso mismo requiere que se considere la existencia de un Dios personal teísta. No estoy debatiendo el modelo en si que esta basado en el Modelo Hawking-Hartle que los físicos deberán hallar si es valido o no. Escribí con James Sinclair un estudio de modelos cosmológicos (para argumentar por la existencia de Dios en base al argumento cosmológico) y me parece que los modelos cíclicos relacionados a un Multiverso encaran muchas dificultades para extrapolarlos hacia un pasado infinito. Por ejemplo para poder tener una serie infinita de ciclos para llegar al universo que percibimos podría requerir una cantidad infinita de afinamiento para este universo”.
Comentario del traductor (Giorgio Piacenza): El “Argumento de Kalam” (“Kalam” significa “discurso”) usado por Lane Craig: el argumento de Kalam original (elaborado por pensadores medievales tanto musulmanes, cristianos como judíos pero derivado de Aristóteles) dice así: Todo lo que comienza a existir tiene una causa para su existencia. El Universo comenzó a existir. Por lo tanto, el Universo tiene una causa para su existencia. Luego de esta deducción se intenta deducir las propiedades teológicas de la causa del Universo.
Según William Lane Craig un infinito actual no puede existir. Si podemos añadir algo sucesivamente a una serie no podemos formar un infinito actual. La serie temporal de eventos en el pasado es una colección formada por añadidura sucesiva. Por lo tanto una serie temporal de eventos pasados no puede ser infinita. Una regresión temporal infinita de eventos sería un infinito actual. Por lo tanto una regresión temporal infinita de eventos no puede existir.
Lane Craig acepta el modelo del Big Bang y no acepta fácilmente (aunque no descarta) a los modelos cíclicos, los de fluctuación del vacío. Aun así, al considerar la posibilidad de universos en un posible “Multiverso” (hay varios cosmólogos cristianos como Don Page, colega de Stephen Hawking que si proponen múltiples universos) tampoco considera que pueda haber una serie actual infinita de los mismos. Respecto a los científicos que menciónan que la física cuántica supone la creación de uno o múltiples universos sin la intervención de un Dios, Lane Craig dice que el origen indeterminado de las partículas virtuales en el vacío cuántico no es una creación ex nihilo propiamente hablando ya que habría energía, espacio y leyes que son “algo”.
En el modelo de Hawking-Hartle, (quizás si retrocediéramos 13,700 billones de años a la singularidad) el tiempo dejaria de ser lo que interpretamos como “tiempo” y quedaría solo espacio. Hablar de un “comienzo” fuera del tiempo no tiene sentido. Queda un universo sin delimitaciones o fronteras. En mi manera de entender esto le doy la razón a Hawking-Hartle y a Lane Craig: Si al Universo físico que conocemos lo pensamos como “fuera del tiempo” este estaría en un espacio mental, un espacio diferente al físico, un espacio de posibilidades que es siempre potencial en relación a lo que consideramos físico (o actual y dentro del espacio-tiempo). Este sentido del estado “pre-Planck” (o anterior a la determinación de la constante de Planck) puede adecuarse a la mate matización del tiempo con el numero imaginario (raíz cuadrada de -1) utilizada por Hawking. El “Universo” Mental de todas las posibilidades especificaría las leyes y parámetros finos del Universo físico conocido así como de todos los universos físicos posibles. También este “Universo” más primordial tendría un origen en otro “Universo de Principios” que hace posible la deducción, la lógica, la mente, las posibilidades, la razón, la proporción, la relación matemática. El origen de este “Universo de Principios” sería Dios. Craig tendría razón al decir que el espacio, la energía del vacío y las leyes físicas “son algo” y no una nada (en el sentido físico) para considerar al origen del Universo “ex nihilo”. Todo (incluyendo a los otros dos universos más primordiales mencionados) surgiría del Ser necesario que es necesario hasta para poder negar su existencia (decir “no ser” también es un reconocimiento de algo). Lo actual pero contingente, lo que puede ser y que también es contingente y lo que hace posible a lo que puede ser todos estos derivan de lo único que ES no contingente. Más allá de los errores humanos de los jerarcas que dirigen a las religiones, este “absoluto”, el Ser por excelencia, tiene una amplitud infinita para que podamos conceptualmente adecuarlo a las mejores definiciones místicas y teológicas de Dios descrito con afirmaciones (en las religiones Bíblicas) y con las vías negativas contemplativas de Occidente y Oriente. En este sentido, la Verdad coincide “principialmente” (no “principalmente”) como diría el gran metafísico esencialista esotérico y perenialista (en este campo líder del pensamiento complejo e integrador) Fritjoff Schuon.
Si (según Aristóteles) las “causas eficientes” son el medio para actualizar la realidad en estado potencial, ¿qué características tendrán estas “causas eficientes” en los supuestos tres niveles de realidad primarios (el Físico-exterior, el Sutil-Mental y el Causal-espiritual). Según la teoría integral de Wilber todos estos niveles de realidad (él los llama “realms”) también tendrían exteriores con algún tipo de materia o substancia (primero la física, segundo la sutil y tercero la causal o “super sutil” de acuerdo a ciertas enseñanzas budistas). Estas substancias exteriores que acompañarían simultáneamente a interiores o subjetividades en los “cuadrantes exteriores” de la Teoría Integral responderían a distintas “causas eficientes”. Integrando estas ideas Aristotélicas y Wilberianas con la poco conocida idea y percepción empírica yogi de los “tres Akashas” (el “Butakasha” para la conformación del espacio y la materia física, el “Chitakasha” para la conformación del espacio y la materia mental-sutil y el “Chidakasha” para la conformación del espacio y la materia Causal-espiritual los cuiales a su vez están todos formados a partir de un solo Akasha principal, el “Mahakasha”) constituyendo los tres niveles de realidad principales según el Vedanta. Aunque los akashas y niveles de realidad primarios se interpenetran en diferentes combinaciones o proporciones (lo cual podría llevarnos a la posibilidad de cambiar las características de universos específicos bajo una ciencia más poderosa que es tanto tecnológica como metafísica), los sub universos físicos responderían primariamente a causas eficientes exteriores, los sub universos sutiles-mentales a causas eficientes interiores o subjetivas y los sub universos causales-espirituales a causas eficientes “principiales” o de principios espirituales/universales especificados dentro del Dios “inteligible” o Dios “con forma” (Saguna Brahman en el Vedanta) o Dios como la Trinidad.
Luego de la reflexión sobre sí mismo que la deidad-consciencia-toda posibilidad realiza surgiría la dualidad como aparente actualización de la posibilidad de no ser. Esta actualización requeriría un tercer aspecto por los que surgiría la Trinidad que se manifestaría en los tres niveles ontológicos primarios Causal, Sutil, Físico en ese orden descendente desde la perspectiva del origen en lo superior. La deidad suprema permanecería trascendente e inafectada por los resultados de esta reflexión que crean apariencias pero las apariencias estarían sostenidas por los tres aspectos de la Trinidad. Estos tres aspectos trinitarios serían importantes no solo desde perspectivas místicas, religiosas y metafísicas sino también prácticas y científicas pues el orden y procesos de relación entre los tres niveles de realidad primarios también originan a las leyes y valores y tipo de universo físico diseñado o programado/especificado que conocemos. El pensamiento integral incluye al descubrimiento (¿o re-descubrimiento?) de estos factores y va más allá de los apegos y dicotomías irracionales que se resisten a conocer la coherencia entre lo físico, lo lógico y lo principial.
Cada tipo de realidad primaria (física, sutil, causal) también tendría una relación epistemológica con un tipo de lógica principal. La física con la lógica clásica aristotélica que enfatiza al medio excluido; la sutil con la lógica de lo implicado en relación o lógica dialéctica, que frecuentemente se puede hallar como una “lógica vital” integrada a las prácticas de vida de los pueblos indígenas originarios. Finalmente la lógica de lo causal podría ser aquella representada por el pensador budista Nagarjuna quien desarrolló el pensamiento “neti-neti” dentro de la tradición de las tres o cuatro lógicas “Catuskoti” para referirse a la verdadera naturaleza de la realidad y así llevar al pensador a suprimir todo intento de comprensión lógica para sumergirse en una experiencia mística que trasciende a toda descripción.
Estas tres lógicas primarias podrían revelarse en la manera cómo interpretamos al símbolo chino Yin/Yang: ¿Son dos opuestos irreconciliables (con medio excluido)? ¿Son dos opuestos complementarios que se interrelacionan (dialéctica vital)? ¿Son dos opuestos inmanentemente internos uno en el otro por los que no se les puede distinguir aunque se les distingue trascendiendo así a la contradicción?
La lógica de lo evidente, de las “cosas”, del método científico basado en el estudio empírico de la estabilidad de las cosas y búsqueda de patrones estables o leyes exteriores, es la lógica útil de los mundos o universos físicos donde existe esta estabilidad. Aún así, en mundos o universos donde existe mayor conexión con la interpenetrante realidad primaria Sutil-mental (la realidad en la cual las posibilidades se pueden manifestar), la estabilidad de lo “objetivo” y exterior sería menos rígida y el principio de “initia” se manifestaría un poco más que que el principio de “inertia”. También “levitas” (levedad) se manifestaría más que “gravitas” (gravedad) y las constantes físicas y probablemente también las leyes serían un poco distintas. Estos son conceptos necesarios para comenzar a entender cómo podrían algunos tipos de seres “extraterrestres” ocasionalmente percibidos por seres humanos ser considerados “físicos” pero de otra “dimensión” cuando en realidad deberíamos decir que son de otro subplano físico quizás más compenetrado por características de la realidad Sutil-mental primaria. “Ellos” poseerían mayor grado de libertad para manipular su propio espacio-tiempo y brevemente hacerlo compatible con el nuestro a partir de la antedicha realidad Sutil-mental primaria que les sería un poco más asequible que a nosotros y también capaz de causar efectos físicos.
Según el profesor Emérito de la Universidad de Stanford (en retiro), el físico de ciencia materiales William A. Tiller, la realidad mental podría crear una mayor integración o simetría entre el espacio físico sublumínico de objetos comunes (“D-Space” o espacio “directo”) y otro espacio “recíproco” superlumínico que lo acompañaría (y que yo creo correspondería a los aspectos holísticos de la fisicalidad). Según Tiller, el espacio combinado resultante podría tener otras características programadas por la intención humana y por ejemplo facilitar o acelerar procesos físicos. Pienso que este hipotético incremento de la simetría entre estos dos espacios físicos complementarios acerca a nuestro universo físico a una mayor integración con la realidad Sutil-mental primaria y me parece que muchos de los llamados “fenómenos paranormales” (como los de sicoquinesia y de percepción sensorial física o electrónica de fantasmas o seres limitados a un subplano de la realidad primaria Sutil-mental) se ha temporalmente formado un espacio así combinado. Pienso que muchas variedades de seres extraterrestres (de los cuales eventualmente podremos aprender ciencia y filosofía así como enseñar y compartir) viven en espacios así combinados pero ocupando lo que podríamos llamar “estados cuánticos” naturalmente Meta estables o coherentemente persistentes y sostenibles en el “tiempo”. Cuando conozcamos cómo combinar las realidades primarias a través de códigos científicos-metafísico-informáticos podremos no solo temporalmente conseguir “espacios” combinados y programados (a laTiller quien ha desarrollado muchos experimentos empíricamente verificables) sino eventualmente también lograr trasladarnos constitutivamente a otros espacios de vida naturalmente Meta estables.
El aspecto tecnológico (ligado a la experiencia objetiva-sensorial personal y-o colectiva) se aplicaría a la interacción causal eficiente entre los aspectos exteriores-objetivos-estables entre realidades. Este aspecto haría más uso de la lógica clásica del medio excluso. El aspecto de programación interior o de causa eficiente subjetiva en relación (ligado a la experiencia subjetiva de relaciones interpersonales e interobjetivas personales y-o colectivas) sería “interno” a los aspectos exteriores-objetivos compartidos o combinados entre realidades y haría más uso de la lógica vital-dialéctica o lógica de la relación en la cual las exterioridades se relacionan obedeciendo causas interiores. El aspecto principial-causal (ligado a la experiencia personal y-o colectiva pero transcendental de observación de causas eficientes universales estéticas) que permite las posibilidades de programación sutil y por ende la estabilidad de exteriores físicos haría más uso de la lógica “neti-neti” que lleva a la suspensión de distinciones antagónicas, a la percepción de principios (o “semillas”) comunes y eventualmente a la contemplación del Espíritu sin forma alguna.
La ciencia del futuro, la ciencia de la exploración vital de todos los planos, universos y realidades creadas, sostenidas y emanadas por Dios incluiría a los principios universales, a la afinación de posibilidades mentales en probabilidades internamente programables y al reconocimiento y uso de una pluralidad de exterioridades objetivas estables (o universos físicos). También incluiría saber cómo combinar las tres realidades primarias tanto desde la perspectiva de sus interioridades como de sus exterioridades. Para hacer esto, la ciencia del futuro también dependería del reconocimiento de los principios causales universales a veces percibidos a través de la geometría sagrada y de proporciones universalmente importantes como la indicada en la serie Fibonacci. La ciencia del futuro tendría que integrar la metafísica esotérica racional, la experiencia de la no dualidad y la ciencia empírica que revela patrones objetivos estables. La ciencia del futuro tendría que enseñar que todo deriva de tres aspectos fundamentales que surgen con la dualidad generada por Dios.